En solemne acto se lanza cátedra Violeta Parra en Pinacoteca de la Universidad de Concepción

En la Casa del Arte de la Universidad de Concepción, teniendo como telón de fondo el mural pensado por Jorge González Camarena, se llevó a efecto la presentación de la Cátedra Violeta Parra.

En la ocasión, el Rector (s), Dr. Bernabé Rivas afirmó que la creación de esta instancia dedicada a Violeta Parra se inscribía “dentro del compromiso permanente de nuestra casa de estudios con las ciencias, la cultura y las artes”. Rememoró que la creadora y recopiladora fue UdeC, desde fines de 1957, cuando fue invitada a trabajar para recuperar la cultura tradicional de la zona y rememoró su participación en la VI Escuela Internacional de Verano, de 1960, en un panel sobre las claves para el conocimiento del hombre de Chile.
El Vicerrector de la Vicerrectoría de Vinculación con el Medio, Dr. Jorge Rojas, indicó que el propósito de la cátedra era “fomentar la investigación, el pensamiento crítico y la divulgación de los múltiples aspectos de la vida y la obra de Violeta Parra, como referente universal de la música popular chilena y en su labor permanente de rescate del folclor, el arte y la cultura popular”. A su vez, situó a Violeta Parra como “protagonista y testigo relevante de importantes acontecimientos de la historia política, social y cultural de Chile y sus regiones” y como “componente fundamental de las representaciones y conocimientos culturales que se mantienen vivos en la memoria colectiva de Chile (…)”.

Por su parte, en representación de la familia, Cristina Parra Cereceda (Tita Parra), nieta de Violeta, agradeció el homenaje de la UdeC: “Es emocionante que Chile esté poniendo atención en Violeta en este momento en que se están por cumplir sus 100 años y, por otro lado, es impactante la demora (…) Violeta se nos fue cuando tenía 49 años y han pasado 50 años hasta hoy”, comentó. Manifestó su alegría por el carácter pionero de la iniciativa, y por la energía que se iba a colocar en que “todo Chile llegue a entender quién era, qué hizo y por qué hizo lo que hizo”. En su opinión, comenzar a comprender la obra y la vida de Violeta, era entender a Chile y a los chilenos.

La ceremonia fue cerrada con una clase magistral de cantautor Manuel García, en la que abordó su multifacético genio creativo, comparándola con otros artistas de su tiempo y resaltando la importancia de estudiar su legado: “Hablar de Violeta y su obra no es nostalgia enfermiza por el pasado, ni especulación poética, ni lirismo antojadizo. Violeta se traduce en sus propias canciones, las que recoge y las que crea. Violeta es El guillatún, Arauco tiene una pena o Según el favor del viento. Violeta es pura admiración hacia quienes le facilitan su entrada a estribillos que ella califica como de verso mayor. Una mirada armónica, amorosa, hacia los decanos, hacia las costumbres antiguas, que luego fijaba su pluma inmensa con melodías nunca escuchadas hasta entonces. Si hubiera que buscar canciones que representaran aún más las penurias del norte o del sur de Chile, serían de Violeta. Seguramente porque ella misma se impuso esta geografía musical. Y lo logra con maestría perfecta”.

El cantautor celebró a su vez la iniciativa de crear la Cátedra, declarando que se trata de un hito en el país: “Yo me siento parte de Concepción y estoy muy orgulloso de que esto esté ocurriendo, que desde una universidad chilena, por fin, podamos hablar de la trascendencia de nuestra máxima creadora”.